Elvira es la protagonista en la sombra de este relato breve. Su protagonista, de quien no sabremos el nombre, nos cuenta, mientras está atrapado bajo unos palés en el almacén del psiquiátrico donde trabaja de administrativo en el archivo de documentación, cómo ha llegado a esa situación. Debido al accidente, a veces recuerda y a veces imagina lo que pasa a su alrededor. Mezcla ingeniosamente la realidad y la imaginación (o puede que la locura). Solo en el sótano, pasan las horas y cree que Elvira le está observando, o quizás haya sido ella la que provocado el derrumbe de los palés. Revive cómo llegó al archivo del psiquiátrico, sus primeros días junto a sus compañeras y a su jefa, y su historia de amor-odio con Elvira. Y no cuento mucho más ya que son un poco más de cien páginas, que te lees de una sentada una tarde de lluvia o un viaje en tren, y es complicado resumir sin desvelar.
Había momentos mientras lo leía que me ha parecido que estuviese leyendo El Quijote, y es que su lenguaje puede resultar demasiado rebuscado, pero resulta gracioso e incluso apropiado con el personaje. Te imaginas al protagonista como el típico rata de biblioteca, que sabe de todo y cita a todos los clásicos.
Aunque creo que se excede a la hora de describir qué siente al estar sepultado, luego, en la segunda parte del libro, me he quedado con ganas de más. De más de Elvira, ya que solo la conocemos desde la visión de él, si es verdad que está un poco loca, qué puede causarle ese comportamiento; y con más ganas de continuación después del final. Existen muchas líneas por donde continuar y todas me parecen bastante interesantes. Desconozco cuál es el motivo por el que solo tiene cien páginas, pues creo que podría desarrollar bastante más la historia.
El autor, Rubén Angulo Alba, nace en Lardero en 1974. Licenciado en Humanidades, trabaja como funcionario para el Gobierno de Aragón. En publicó 2014 La escritura necesaria, teniendo gran difusión en redes sociales. Lord Jim publica en 2015 Elvira y próximamente se publicará otra obra suya: Memoria.
Ángeles Martín.
@Angelesmmartin
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3 comentarios:
Gracias, María Ángeles por haberte tomado el tiempo y el riesgo de leer a un autor prácticamente desconocido. Es difícil juzgar a un autor que no tiene detrás la fuerza de una editorial potente, ese rumor de fondo que puede ayudar al enjuiciamiento de cualquier trabajo artístico (subjetivo).
Me ha gustado tu reseña. Fíjate que no hay una igual, y hay muchas en la red. Cada lector pone el acento en un fragmento, en un tema técnico... Eso es lo que me hace sentir orgulloso de Elvira. También que la mayoría de los lectores quieren más, y yo erre que erre, que digo que la historia está bien como está, y no le añadiría ni una sola palabra. En su concisión está su logro; si me hubiera extendido más, que es lo que los lectores piden, el resultado no hubiera sido el mismo. En definitiva yo escribo para mí, que es lo que creo que deben hacer los escritores. Trato de ser consecuente con mis ideas.
En fin, me quedo con esas semejanzas que encuentras con prosas como la de Don Quijote. Así es, utilizo arcaísmos, tengo mi estilo, mi propio lenguaje, y me dejo llevar por él.
Una vez más agradecido, y hasta la próxima.
Rubén Angulo.
La tengo esperando en la estantería. Espero leerla este mes.
Un beso ;)
¡Gracias por vuestros comentarios!
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