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LO QUE PUDO SER Y NO FUE


No hay día en que no piense en lo que pudo ser y no fue.

En ese reencuentro que tanto soñé y al final, por circunstancias de nuestras vidas, nunca llegó a producirse.

Y es que en el universo paralelo que mi mente crea cada noche antes de que Morfeo me lleve en sus brazos, tú y yo nos volvemos a ver… El dónde no importa, el escenario cambia cada noche pero los protagonistas y los actos son los mismos. 
Rememoro la calidez de tu voz y tu sonrisa franca y pícara, y aprieto los ojos, convenciéndome de que es real. De que está ocurriendo y voy más allá.

Fantaseo con frases de doble sentido, con la proximidad peligrosa de nuestros cuerpos y con nuestros labios cada vez más cerca; con ese instante antes del primer beso en el que dejas de pensar para tirar la razón a la basura y dejar que el corazón y las ganas de cruzar el límite de lo políticamente correcto se impongan, hasta que por fin lo inevitable sucede.

Y como en las películas, con una suave balada de fondo, tiramos todo lo que hay sobre la mesa, incluidos nuestros perjuicios, para solo dejar a nuestros cuerpos bailando al son de una pasión y una lujuria retenidas desde que nos vimos por primera vez.
Luego la realidad me golpea y me pregunto que si tu vida y la mía hubieran sido diferentes esta fantasía que me atormenta hubiera podido materializarse.

Pero… ¿Aún estamos a tiempo, no?
No, no lo estamos.

Sería el mayor error que cometeríamos en nuestras vidas… 
Un maldito pero delicioso error.

No sé si a ti pasará lo mismo. No sé si también fantaseas con mi cuerpo entre tus manos mientras tu boca retoza dichosa por mis tatuajes y me arranca jadeos de placer mientras susurra tu nombre. 
No me importa, porque en mi universo todo es distinto, nuestra vida es distinta y lo que pudo ser y no fue, es. 

Pese a estar amarrada a un sueño, seguiré fantaseando con nuestro reencuentro cada noche, deseando meterme entre las sábanas para cerrar los ojos y sentirte. 
Sentirte en mi mente, conformándome con eso… sabiendo que lo que pudo ser y no fue, nunca será. 

Mª Nieves Fernández.
@Marynfc

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LO QUE NO VES


No ves nada. Estás eternamente ciego, amor. No eres capaz de ver la forma en la que yo te veo. No ves que muero por ti, que aunque no te lo repita constantemente; mataría por uno de tus besos a cualquier hora de mi día. Y que en esos días que no te veo, mi interior no es el mismo. Triste se queda. Estás ciego, quizás de amor, quizás por voluntad propia. Sigues empeñado en no quitarte la maldita venda del miedo. No te das cuenta que no me tienes que temer, que soy tuya y que lo único que quiero de ti es seguir viéndote y que nos veamos; en cualquier puesta de sol, en cualquier playa, en cualquier cueva, en cualquier lugar rodeados de gente aunque nos sintamos eternamente solos. Abre los ojos, empieza a mirar hacía delante, quiero que me veas allí; cerca pero lejos, permitiendo que sigas tus pasos mientras sigues los míos. 

Blanca de Paco.
@blancadepaco
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RESPUESTAS UNIVERSALES Y ELEGANTES PARA SALIR DEL PASO


(Se recomienda responder con sonrisa y poniendo la mano suavemente en el hombro del que pregunta)

BLOQUE AMOR:

-¿Para cuándo novia/o?

-Para cuando mi corazón pueda dedicarle el máximo tiempo posible.


-¿Habrá boda pronto?

-Pronto casaremos nuestra decisión.


-¿Iréis a por la parejita?

-Ya la tenemos. El bebé ha vuelto a emparejar nuestras sonrisas e ilusiones.


BLOQUE AMIGOS:

(Insistiendo incesantemente) -¡Venga va vente! -¿Qué tienes qué hacer?

-Necesito hacerme a mí mismo para poder disfrutaros como merecéis.


-¡No estudies tanto, que seguro vas a aprobar!

-Pero he de probar si realmente eso es seguro.


-¿Pagamos a medias?

-¿Y por qué no enteros?


BLOQUE PROFESORES:

-¿Podrías explicarle a la clase qué es tan gracioso y así nos enteramos todos?

-Es tan gracioso lo que acaba de explicar en clase que no me he enterado de la pregunta. ¿Puede repetirla?


-¿Sabrías responder a esta pregunta (Fulanito)?

1.-Sabría, pero a todos nos gustaría escuchar antes su respuesta.

2.Sabría responderla, pero quizás no de la forma correcta.


BLOQUE PRIMERA CITA:

-¿Por qué has tardado tanto?

-Porque tenía tanta prisa en verte que he perdido el tiempo mirándote en mi mente.


-¿Qué te gusta hacer?

1.Responder a chicas/os tan guapos/as e interesantes como tú.

2.Agradecer a la vida por dejarme conocer personas como tú.

3-Reservar latidos para cuando encuentro personas como tú.


-¿Te gustaría vernos de nuevo?

-De nuevo me encantaría porque te conoceré una y otra vez.


BLOQUE CUÑADOS:

-¿Qué serie me recomiendas, ésta o ésta?

-La serie de besos y sonrisas con mi hermano/a.


-¿A quién votas, izquierda o derecha?

-Siempre votaré que no me cambien de cuñado.


-¿Conoces esta canción, libro, película?

-Conozco el buen gusto de mi cuñado/a.


D.A.C.
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INGENIEROS DE CAMINOS


Cuando dejo volar mi imaginación a veces no vuelve, a veces la pierdo entre caminos oscuros y estados de meditación ausente, cuando cierro los ojos para pensar en qué quiero expresar y la palabra coge carrerilla y se va. A veces me asusto de mí misma, porque entre gota de sangre y gota que derramo en mis páginas veo la sed asomarse en las esquinas, ni divina ni comedia mi cara cuando noto que mis garras asoman, cuando de contener la mente hasta la mandíbula me duele y la línea entre el bien y el mal se distorsiona, qué es bueno y qué es malo si de mano en mano el mensaje se pierde y nunca comprendemos ni la mitad de lo que dice la gente, si escuchamos sólo murmullos cuando oímos y sólo sufrimos si el cuervo se nos posa en la frente. Dolor, qué es dolor, es el cuerpo que sufre o la mente que abandona, es el naufragio de los sentidos o el romperse en pedazos de una persona...
Dolor que algún momento nos ha tomado a todos, por sorpresa o con permiso, dolor que atraviesa y conmociona...
Cuando dejo volar mi imaginación a veces no vuelve, la pierdo entre arboledas soleadas y nubes que parecen querer rozar el suelo, y puedo imaginar vidas pasadas de personas que vivieron otros tiempos, y oír el murmullo de pájaros que en mi hábitat real jamás existieron. A veces me asusto de mí misma, porque entre pincelada y línea, nota y paso, veo cómo la fantasía que imagino es menos carente de realidad que el propio mundo en el que vivo, que hasta la luz del sol colándose por mi ventana es más bella que muchas personas con quienes convivo en un espacio tan pequeño como un planeta medio hundido. Felicidad, la felicidad sólo es el destino, pero el humor que llevamos en el camino siempre determinará cómo de duro sea de recorrer, con miedo al precipicio es más fácil caer.

Alba Ferrer.
@dihiftsukai
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LA PLAYA

Siempre fui de cercanías lejanas; de bosques inundados por compañías sin sentido y de mares más revueltos que en calma. Me solía dejar llevar por las olas que marcaban un destino alejado de las orillas paradisíacas. Un día eso cambió; una corriente distinta apareció y decidí dejarme acariciar por unas olas que me transportaron a una playa de paz.

Desde entonces no he querido moverme de allí. Adoro sentir mi cuerpo empapado de la marea que se dispone a subir y bajar, sentir mis labios salados y escuchar la melodía del viento entre las palmeras. Me recuerdan que estás cerca. Que queda poco para volver a sentirte otra vez, para volver a fundirme en tu pecho y en la melodía de tu risa. Me gusta ese lugar nuevo. Me hace sentirme bien, a salvo, segura. 

Blanca de Paco
@blancadepaco
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LA HERMANA DE CENICIENTA


Ya hace algunos meses que me ha dado por jugar a la cenicienta. A ver, me explico; no ando buscando (ni de lejos) un príncipe azul ni nada que se le parezca; tampoco voy hablando por las esquinas con ratones vestidos de gala y, por lo que a mí respecta, no he heredado el don de la pulcritud en su más alto grado. En fin, estoy jugando a la cenicienta, sí, pero estoy jugando a ser una de las hermanastras. El caso es que no sé cómo se llaman ninguna de las dos y por mucho que me supiese sus nombres, si hubiese dicho “me ha dado por jugar a ser Amelia”, por ejemplo, nadie se habría situado en el cuento al que quiero trasladaros. El cuento del zapato ajeno.

Ahí quería yo llegar, al zapato de cristal. En fin, escribo con la intención de encontrar consuelo o explicación alguna en el corazón de mis palabras. Hace un tiempo que le quito los zapatos a mi hermana; los zapatos, los pantalones, los jerséis. Dicho así parece que se trate de algo banal y superficial. No os confundáis, no se trata del gusto por la moda o por una ropa en concreto. Sus aficiones, su música, su tranquilidad, su orden, su éxito, su persona. Todo eso también se lo estoy quitando de algún modo. Quizá “quitar” no sería la palabra que busco, pues no me estoy adueñando de sus modos a la vez que le despojo de sus formas, no, ella queda intacta. Se trata, más bien, de cierta mímesis, de dejar de ser yo para acercarme más a lo que es su piel y su esencia, para vestirme de su persona. Para que nos entendamos, la imito, porque quiero ser como ella, quiero recibir sus mismos aplausos, su reconocimiento, quiero dejar de sentir que ando desafinada en esta clave de sol que parece iluminar a todos mientras a mí me hace sombra.

De sus zapatos hablaba. Me van pequeños, me aprietan, ni si quiera me gustan. Lo peor de todo es que el placer más grande que siento con ellos es cuando, por fin, puedo quitármelos, estirar mis pequeños dedos mientras corro o me da por saltar o subir por los árboles. ¿Que por qué me los pongo? Porque, para mi edad, es el tipo de zapatos que debería de llevar, como persona madura. Bueno, eso he oído. Debería ser tantas cosas que no soy… o eso dicen. Es duro juzgarse como tigre cuando eres una vaca, y viceversa. Como vaca te dices, debería ser ágil, veloz, una depredadora, y sin embargo disfrutas en la quietud del prado, en el placer de la tranquilidad y del mutismo. De nada sirve ese traje a rayas negras y amarillas que tú misma has confeccionado concienzudamente, pues con él tan solo consigues despistar un par de minutos al que te ve por primera vez. Pero cuando hablas, cuando eres realmente tú se nota a leguas que a ti lo que te va son las manchas, el blanco y el negro, que eres una vaca y que difícilmente vas a lograr comportarte como un tigre. Así que el único modo de empezar a completarte es renunciar al traje ajeno y vestirte con tus propias ropas. Pero si a ti siempre te han dicho que ser tigre es lo mejor que puede pasarte, que eres el rey, que eres único, ¿por qué vas a conformarte con ser una simple res?

Supongo que no es fácil aceptarse a uno mismo, aceptar las limitaciones que te impone tu propio ser y reconocerte en ellas. Lo que sí resulta realmente sencillo es ver el brillo en los demás, ya sea otra vaca como tú, un gusano, un león o una serpiente. En el otro siempre resulta menos complicado ver las virtudes y aceptarlo por lo que es.

Quizá empiece a desabrocharme sus zapatos, no por eso dejaré de admirarla, desde luego, sino por empezar a dejar ver realmente lo que soy, que no es tarea fácil.

Sara C. Labrada
@sarazamz
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EL MOMENTO ES AHORA


No es difícil empezar de cero, lo complicado es saber cómo hacerlo.
Nos aferramos a la entrada del año nuevo, al día uno, al próximo lunes, al comienzo del mes o de una nueva estación para resetear nuestras vidas como si fueran el sistema operativo de un ordenador, sin saber que lo pasado seguirá condicionando el presente mientras organizamos el futuro. 
Somos esclavos de un tiempo que no nos pertenece, del que no tenemos el control, al que ni siquiera podemos tocar, aunque sí medir pero de una manera fugaz y subjetiva. 
Nos aferramos a que cuando una nueva época comienza, cuando abrimos nuestra nueva agenda o ponemos un nuevo calendario todo cambiará. 
No.
Los que debemos cambiar somos nosotros y da igual que sea día uno a las doce de la noche que día siete a las cuatro y media de la tarde. 
Piensa que quieres cambiar y ponte a ello ahora. Da igual la fecha, la hora… Solo importan tus ganas, tu fuerza, tu motivación.
Márcate una meta, un objetivo – realista - , y comienza a pensar como lo llevarás a cabo. 
Puedes hacerlo, puedes hacer todo lo que te propongas.
Nadie puede (ni debe) decirte que no eres capaz de esto o de lo otro. Aunque todos tenemos limitaciones, la tuya puede ser el cielo.
Olvídate de la hora, de la fecha, del lugar…
¡Hazlo! ¡No pienses! ¡Hazlo!

María Nieves Fernández.
@Marynfc

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QUERIDO AÑO NUEVO


Gracias por todo. Gracias por despedir este año con una sincera sonrisa, por recordarnos que podemos volver a empezar de cero y que estas fechas hay que pasarlas con la verdadera familia. Gracias también por el pasado año. Jamás lo olvidaremos y si lo hacemos nos lo recordarán las sonrisas que nos proporcionaste mientras estabas aquí. Gracias de nuevo por poner en nuestro camino personas que hacen que nuestra vida sea mejor; más feliz, más risueña y con mil colores. También agradecerte todos esos besos que hemos dado en tus días, todos los abrazos y aunque duela, cada despedida que nos has obligado a forzar. Supongo que en el fondo era una ayuda para borrar personas de nuestro camino. Gracias también por ayudarnos a superar todo aquello que parecía imposible, como bien sabes; todo es cuestión de tiempo. Gracias por no olvidarte de nosotros, por llegar y por susurrarnos mientras sonaban las campanadas de las doce que este año es año de oportunidades y de esperanza, de amor verdadero y de sonrisas aseguradas, que vas a intentar ayudar a todas aquellas personas que lo necesitan y que el sol va a salir todos los días en nuestros corazones. Por último agradecerte que podamos brindar por nosotros y por los que no están, eso significa que seguimos aquí, disfrutando del absoluto y mágico misterio de la vida. 

Blanca de Paco.
@blancadepaco
 
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