sin pensar en mí.
Porque no puedo engañarme
ni callar la rabia
por no saber qué decir
y no te lo digo...
y no te lo digo...
Porque al volante entre gritos que callan
huyo por la carretera de tus pestañas.
Porque bombeo latidos que esperan
tu abrazo y tu pulso pruebe que mi sangre
circula sana cada vez que te miro
y no quiero mirarte...
y no quiero mirarte...
Porque no es justo para ti ni existe ley para mí
que permita besarte en tu almohada.
Porque tu coco está a prueba de balas.
Porque tú ganas a los que no cuentan nada.
Porque contigo sería amor
y no puedo enamorarme...
y no puedo enamorarme...
Porque no sé si sabré escribirte que tú eres mi futuro.
Porque no sé si aún es pronto
o ya es demasiado tarde contigo.
Porque tus labios componen tantos versos
que ansío probarlos
y qué poesía besarte...
y qué poesía besarte...
Porque en tus ojos marrones e ingenuos te hundo en los míos.
Porque me callo y en voz baja deseo que derribes mi muro.
Porque no sé cómo decirte que ardo por ti y anhelo verte ardiendo.
Y encendidos los dos. Tú y yo. Apagado el resto.
Porque te quiero
y no sé cómo quererte...
y no sé cómo quererte...
Daniel Arrébola
3 comentarios:
Precioso. Gracias Daniel.
me encanta!!
Que cosa tan más hermosa
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