DEFÍNEME AMOR


Hay cosas que no soy capaz de describir, como el amor; he visto personas amarse tanto y tan poco de formas tan distintas que no podría definirlo, porque para cada una de mis definiciones habría un caso triunfal que la debatiese y un fracaso que la aboliese. Supongo que hay muchos tipos de amor, amores de café, amores de tren, amores de ascensor, amores de vuelo, amores de fogata a la luz de la luna, amores del trabajo a casa y de casa al trabajo, pero muy de vez en cuando encuentras a una persona que quieres que sea todos esos, y tu amor de ver una película un sábado noche en el sofá, y el de enjabonarte la espalda en la ducha, que quieres que sea tanto el de una noche como el de toda una vida, una persona que cumpla todas tus fantasías y vacíos, una persona, solo una. A veces, solo a veces, pasa.

Hay cosas que no soy capaz de describir, como un beso; he visto tantos besos, que una definición sería estúpido, puesto que incluso definiéndolo como un gesto que se hace con los labios erraría. Hay besos dulces, besos apasionados, besos en la boca, besos en la frente, en el cuello. Hay besos que se dan y besos que se reciben, besos que son con los labios, con los dientes, con la lengua. Incluso rozar las pestañas de alguien con la lengua se considera un beso. Y hay besos de película y besos de vídeos caseros. Pero ese beso que te saca una sonrisa, una lágrima y sobre todo ese beso que consigue que tu cuerpo lo recorra un escalofrío; esos besos, solo a veces, pasan.
Hay cosas que no soy capaz de describir, como una mirada; he visto miradas tan diferentes y tan significativas que no sabría cómo definir ese término. Podríamos decir que una mirada es el contacto de las trayectorias visuales de dos personas... pero he visto miradas de decepción chocar contra el suelo y ojos llenos de orgullo y lágrimas rozar el cielo, he visto miradas más tristes que el llanto de un niño, y agonizantes como la muerte misma, he visto miradas de vergüenzas huidizas como ratones... y también he visto miradas tiernas, tímidas, dulces, miradas de amor declarado eterno y de amores ocultos en abrazos no por ello menos longevos, he visto miradas que decían 'daría mi vida por ti' cuando un padre miraba a su bebé, he visto miradas de perdón, miradas que decían 'te amo, sin motivo, sin razón' y esas miradas, esas, solo a veces, pasan.

Alba Ferrer.
@dihiftsukai

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
;